Fèlix Colomer tiene 29 años y a lo largo de todo este tiempo ha vivido innumerables vidas. Ha sido árbitro, ha trabajado en la industria del cine para adultos, ha formado una banda de trap, ha sido una promesa infantil del ajedrez… Y todas estas aficiones, trabajos y pulsiones vitales las ha vivido con intensidad y le han servido para extraer conclusiones y aprendizajes. Hace poco su vida cambió: ahora es padre. Y esto ha hecho que se plantee si merece la pena que su hijo repita todas esas vidas que Fèlix ha vivido. Estas reflexiones con la cámara al hombro forman Las vidas de Fèlix, una emotiva y divertida carta audiovisual para su hijo Riu.