Aurelio Casillas es un niño inteligente con grandes planes. Su padre, violento, mantiene en secreto una segunda familia; su mamá, por su parte, se preocupa por la falta de oportunidades para sus hijos. Aurelio sigue el que cree es el único camino para tener éxito en su pueblo: se acerca a don Cleto, un peligroso criminal, que decide emplearlo. Los negocios turbios los ponen en constante enfrentamiento con el capitán de policía Jiménez, que se convierte en su némesis. En la medida en que tienen más éxito en sus empresas criminales, más inevitable se hace el encuentro con el destino.